Hubo doce segundos infinitos
entre tus ojos y los míos,
antes de ese beso.
Después ¿quién sabe?
La noche toda se desvaneció en ternura.
Las estrellas explotaban hacia adentro,
los agujeros negros bebían ron
con los fracasos y los hielos.
La noche toda se embarcó en un olmo
de colores inventados...
Pero, como en todo cuento,
hubo un "pero" después del vivieron
felices para siempre.
Entre nuestros cuerpos, ahora,
una cortina de hierro.
Mudo, sucio y sin voz,
me atrofié los dedos
golpeando el acero.
Por supuesto, mi amiga,
el silencio es lo único
que me acompaña a casa.
sábado, agosto 30, 2008
Te vas de tierra a viento,
Ojos de invierno.
Te pierdo en la globalización.
Palomar Flor, árbol con alas,
Llevo eones maldiciendo
Este cacharro hueco
Con luces y chirridos bengala...
Es inútil,
Entre las rejas del nuevo mundo,
Tu voz no se filtra.
Te vas de tierra a viento,
Atardecer, color de los colores...
Me haz clavado hondo tus raíces
Y sin decir adiós, volaste.
Te fuiste al Otro Mar.
¡Maldita la Ninfa de los Besos!
Es cruel e injusta, pero certera:
El jacarandá siempre despierta más
Las miradas abiertas
Cuando crece libre.
Ojos de invierno.
Te pierdo en la globalización.
Palomar Flor, árbol con alas,
Llevo eones maldiciendo
Este cacharro hueco
Con luces y chirridos bengala...
Es inútil,
Entre las rejas del nuevo mundo,
Tu voz no se filtra.
Te vas de tierra a viento,
Atardecer, color de los colores...
Me haz clavado hondo tus raíces
Y sin decir adiós, volaste.
Te fuiste al Otro Mar.
¡Maldita la Ninfa de los Besos!
Es cruel e injusta, pero certera:
El jacarandá siempre despierta más
Las miradas abiertas
Cuando crece libre.
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